jueves, 27 de enero de 2011

ciclos

Cuando se habla de ciclos, es porque se cree en ello. Es una ancestralmente arraigada creencia… la reproducción, la reencarnación, el tiempo, la vida; y la respiración. Curiosamente He, el sonido de la respiración, fue de los primeros vocablos que el hombre empezó a usar para dar una idea a entender, el aliento era considerado dador de vida. ¿Cuándo empezó el humano a estar consciente de los ciclos? Este conocimiento ancestral se remonta a los instintos básicos, antes del poder del pensamiento. ¿Y qué daba poder al ciclo antes del pensamiento?
El PODER mismo. La vida se intentaba intentándose. El ciclo de la Unidad, de la Fuente.

¿ Qué se adhiere con el pensamiento al poder ? el placer, los sentimientos, una memoria que debe ser altamente detallada y alerta . más allá del bien y del mal, el humor =)

lunes, 24 de enero de 2011

DE LA JUVENTUD

De la juventud


Que haz hecho con tus jóvenes México
Haz olvidado el arte de tus raíces
Y Los haz vendido al peor postor
Muertos de bala
Cuerpos sin cabeza
El ocio exacerbado en tus calles
La falta de oportunidad para su imaginación que debería de ser el motor de tu progreso
El dolor de sus madres en medio de la calle llena de polvo y de sangre
Haz dejado su camino manchado con dinero fácil
Con fútiles sueños de poder
Haz cambiado la creatividad por la muerte y el desasosiego
Les cambias balas por flores
Sueños por hambruna
Inteligencia por programas de televisión
Anhelos por ignorancia
Los Huérfanos de doscientos años
Esperan su turno
En medio del caos y la oscuridad
En medio de declaraciones falsas
De manipulación electrónica
Esperan su turno para retorcerse en la red
Silenciosos, anónimos
Rencor tras rencor
Ojo por ojo
Se cimbra la tierra y el sol se apaga
Eso pasa en sus jóvenes almas
Que haz hecho con tus jóvenes México
No haz hecho nada por salvarlos.

sábado, 22 de enero de 2011

Budismo

Cuando nació el príncipe Sakiamuni (mejor conocido como Buda), los astrólogos predijeron que el recién nacido había de abandonar la grandeza de su real estirpe. El rey, su padre, alarmado por este horóscopo, mandó construir un magnífico palacio rodeado de hermosos jardines para que viviera el príncipe sin que pudiera conocer ni desear nada distinto de lo que tenía.

Cuando Sakiamuni tuvo uso de razón, se encontró un día con un anciano encorvado que caminaba apoyándose en un bastón. Le llamó la atención el aspecto de aquel hombre, e interrogando a sus acompañantes averiguó que aquello era la vejez, un estado al que todos los hombres llegan con los años. Otro día, vio un enfermo, y así supo que existía en el mundo la enfermedad. En un tercer encuentro semejante vino en conocimiento de que existía la muerte. Desde entonces, el príncipie crecía preocupado por los medios que pudieran hallarse para librar a la humanidad de estas tres calamidades que la afligen: vejez, enfermedad y muerte. Su pensamiento pudo tanto, que se decidió a abandonar palacio, riquezas, honores y reino, a fin de retirarse al desierto a meditar sobre los tristes destinos humanos. El horóscopo se había cumplido.

En los largos años de meditación solitaria, llegó a la conclusión de que la causa de los males humanos es el deseo. Si no deseamos la juventud, la salud y la vida, no temeríamos la vejez, la enfermedad y la muerte. Anulemos todos nuestros deseos, y habremos alcanzado la quietud interior. El “nirvana” (el no ser) es el ideal supremo de la felicidad. He aquí el fundamento del Budismo.